El
Carnaval de Venecia una fiesta
de historia, lujo y glamour
Por: Alejandrina Uribe-Betancourt
Cuando
llega el carnaval, Brasil se convierte en el país más famoso del mundo, por sus
fiestas y desfiles de carrozas en Río de Janeiro y en todas sus ciudades. Fiestas como ésta, aunque con presupuestos más modestos, pero con el mismo espíritu de alegría y coloridos
desfiles también se dan en la mayoría de los países del Caribe. Pero, hay una
celebración del carnaval que lejos del estruendo de la música caribeña y los
cuerpos semi desnudos de sus bailarinas, nos sorprende por su estilo retro con
trajes típicos del siglo XVIII, su aire romántico y misterioso, pues en esta
fiesta llevar el rostro completamente oculto bajo hermosas y muy bien
elaboradas mascaras permite a nobles y
no tan nobles disfrutar desde las más elegantes y selectas fiestas,
hasta las escapadas amorosas prohibidas que tienen su nido muchas veces en
esta celebración y todo tiene inicio bajo el elegante "anonimato" de las máscaras. Hablo del Carnaval de Venecia evento que hace de la ciudad de los canales, una pasarela
de alta costura, donde la imaginación y el glamour van de la mano.
El
Carnaval de Venecia tiene su origen en el siglo XVII, y fue la escusa perfecta
para que los miembros de las familias con títulos nobiliarios se disfrazaran
para salir a “mezclarse” con los plebeyos en las calles de esta ciudad italiana. En tal sentido, las máscaras son el
elemento más importante de cada atuendo y ellas por si misma son verdaderas
obras de arte y diseño. Este carnaval tiene una duración de 10 días. En las
noches se realizan bailes exclusivos en salones de los palacios venecianos y mientras en el día se dan las comparsas
conocidas como Compagnie Della Calza con desfiles
por la ciudad. Los trajes siguen hasta el presente inspirados en la moda del
siglo XVIII y las maschera nobile, (mascara o careta blanca) sigue siendo el alma para cada disfraz.
Hermosos vestidos y máscaras que pueden costar
cientos de dólares, son parte de este carnaval que fue abolido por el emperador
Napoleón Bonaparte en 1797, siendo restablecida esta celebración en
el siglo XX, específicamente en el año 1979. A diferencia del carnaval caribeño en Venecia la
fiesta comienza cada miércoles de ceniza por lo que coincide con el inicio del
tiempo de cuaresma.
A
partir el año 1979 los trajes han comenzado a tener mayor variedad de colores,
pero en las máscaras los colores blanco, dorado y plateado son la ley. (Tal
y como índica la tradición, pues estos eran los colores en las primeras máscaras
usadas en Venecia, y hay documentos que dicen que las primeras mascaras
(elaboradas en papel maché) datan del 2 de mayo del año 1268. A su vez, las
máscaras eran decoradas con lazos, telas, piel o gemas, y se hicieron tan
codiciadas que fue así como surgió un nuevo trabajo, el del artesano que elabora las mascaras, tradición que se mantiene aún.
El
Carnaval de Venecia es hoy en día la celebración que más aporta a los ingresos
por turismo en esta ciudad y es a su vez, invitación
maravillosa a viajar a siglos pasados y esplendorosos, donde trajes,
máscaras, y desfiles en góndolas hace de esta celebración un momento
inolvidable y un original encuentro con el mundo del glamour. Cada año los
artesanos elaboran máscaras más llamativas y lujosas, cada año los diseñadores y modistas se
esfuerzan porque los trajes sean fieles al estilo del siglo XVIII plenos de lujo y colorido, pero con
toques de originalidad donde arlequines, damas de antaño, nobles y otros
disfraces hacen de esta fiesta una pasarela inolvidable. Por eso, a continuación les presento las fotos del Carnaval más elegante y chic en el mundo.
Alejandrina Uribe-Betancourt
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